Washington.- Los precandidatos presidenciales despertarán la mañana del miércoles frente a la fría y dura verdad de las matemáticas sobre los delegados. Las cuentas podrían dar un respiro a los líderes de las primarias republicanas y demócratas, pero para el resto la realidad podría ser dolorosa.
A continuación, los aspectos que deben observarse el día después del Supermartes, en el que se repartieron la cuarta parte de todos los delegados en disputa en las contiendas republicana y demócrata para la elección de los respectivos candidatos presidenciales:
EL CONTEO:
En general, Trump lidera la carrera para convertirse en el candidato republicano a la Casa Blanca con 268 delegados. Le siguen Cruz, con 142, Rubio con 78, Kasich con 24 y Carson con ocho. Se necesitan 1.237 delegados para ganar la candidatura presidencial republicana.
En el bando demócrata, Clinton tuvo 441 de los 865 delegados que se repartían en la jornada electoral más intensa de las primarias presidenciales estadounidenses. Sanders está por detrás con al menos 262. Se necesitan 2.383 delegados para ganar la candidatura presidencial demócrata.
EN TÉRMINOS GENERALES:
Observe cómo los líderes en ambas contiendas, Clinton y Trump, se posicionan de cara al futuro. ¿Se centrarán más en sus contrincantes en las primarias o actuarán más como si ya se estuvieran disputando las elecciones presidenciales? Trump dijo el martes en la noche que si Clinton no había resuelto nada hasta ahora en Washington “no resolverá nada en los próximos cuatro años”. Clinton, por su parte, censuró lo que describió como el discurso enfadado y divisivo del favorito republicano, aunque no lo identificó por su nombre.
LA FUERTE CONNOTACION:
El buen desempeño de Trump podría suscitar nueva controversia sobre la posibilidad de una convención abierta de republicanos que no aceptan la idea de que el multimillonario sea finalmente el abanderado del partido.
EL CAMINO DE RUBIO:
El itinerario de Rubio refleja sus prioridades. Hace campaña el miércoles en Michigan, que votará en primarias el 8 de marzo. Ya prepara grandes actos en su estado natal, Florida, donde la votación se efectuará el 15 de marzo a la par que en estados donde el ganador se lleva todos los delegados. La votación adelantada ya comenzó en Florida en tanto que Rubio ha manifestado claramente la importancia de esa región para él: “Vamos a ganar Florida. Florida no va a dar su voto a un estafador como Donald Trump”.
EL CURSO DE CRUZ:
Esté pendiente de un Cruz más firme, rejuvenecido por los triunfos en su estado natal, Texas, y el vecino Oklahoma. Mientras subraya que es el único candidato que ha conseguido victorias sobre Trump hasta el momento, Cruz exhortó el martes en la noche a otros precandidatos republicanos a que “consideremos unirnos en oración” y hacer alianza contra el magnate. Traducción: Retírense de la contienda.
EXAMEN DE CONCIENCIA DEL PARTIDO REPUBLICANO:
Hay que observar cómo la corriente dominante del Partido Republicano se reconcilia o no con Trump. Antes de la votación del Supermartes, algunas personalidades del partido anunciaron que jamás apoyarán a Trump. Otros manifestaban con renuencia que respaldarán a quien al final resulte ganador.