En breve los jóvenes “soñadores” beneficiados con la acción diferida o DACA podrán obtener licencias de conducir en Arizona, esto luego de que la Corte Suprema de Estados Unidos rechazó este miércoles la petición de la gobernadora Jan Brewer de suspender una sentencia de un tribunal inferior.
Solo es cuestión de tiempo para que la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito emita una orden instruyendo a la corte de distrito para que levante la prohibición. No se sabe cuándo ocurrirá esto, pero lo que es seguro es que el camino para que los Dreamers obtengan licencias de conducir e identificaciones oficiales en el estado se ha despejado.
La decisión del tribunal beneficiará a más de 20 mil inmigrantes en el estado que recibieron una visa de trabajo y una tarjeta de seguro social bajo la acción diferida de Obama, y que habían esperado durante dos años para que se llegara este momento.
“Este es uno de los días más felices de mi vida de activismo”, expreso con júbilo la directora de Arizona Dream Act Coalition, Dulce Matuz.
“Han sido dos largos años pero valió la pena con esta decisión que beneficiará a 20 mil soñadores de Arizona y sienta un precedente muy importante para otros estados que se empeñan en discriminar”, agregó.
Pese a tener un permiso legal de la administración Obama, los jóvenes traídos ilegalmente cuando eran niños, conocidos como “soñadores”, no han podido tramitar una licencia de conducir ni identificación oficial en Arizona, mientras que en otros estados si recibieron este beneficio.
“La orden ejecutiva de Brewer, de negar licencias fue un movimiento racista. Ahora con esta decisión parece que nos vamos a poder mover como una comunidad unida y ayudarnos y prepararnos para las elecciones en 2016”, expreso el abogado de inmigración Rubén Reyes.
En julio pasado la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito resolvió que el Estado de Arizona debía comenzar a emitir licencias de conducir porque los inmigrantes que entablaron el juicio podían probar que la prohibición de Brewer violaba la cláusula de igualdad ante la ley de la Constitución de los Estados Unidos.
La demanda data desde el 2012 cuando la gobernadora emitió una orden ejecutiva que niega a los Dreamers beneficiarios de DACA la oportunidad de obtener licencias de conducir pese a que cuentan con una tarjeta de seguro social y una visa de trabajo que les brinda un alivio migratorio temporal.
“Esta victoria les pertenece por su arduo trabajo y determinación“, declaró el abogado de inmigración de Arizona Salvador Ongaro. “Los soñadores, al igual que la gran mayoría de los inmigrantes, sólo quieren hacer las cosas de la manera correcta una vez que están en este país. Ellos lucharon por ello y lo lograron, y se merecen esta Victoria”, agregó.
“Permitir que estos jóvenes el mismo privilegio para conducir nuestras calles fue la decisión correcta como una cuestión de derecho y las políticas públicas. Este es otro ejemplo en el que los tribunales han dicho que el Estado de Arizona no puede tomar un curso de acción que sea contraria al imperio de la ley”, enfatizó.
Un paso en la dirección correcta
“Ha sido una ardua y larga lucha por la justicia. Los soñadores de Arizona han sido persistentes y fuertes en exigir su derecho de ser tratados con justicia. La obtención de una licencia de conducir de Arizona es un paso en la dirección correcta”, declaró el president y director ejecutivo de Chicanos Por La Causa (CPLC).
“Agradecemos la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y de la Novena Corte de Circuito de Apelaciones por fallar a favor de la justicia y despejar el camino, para finalmente conceder a todos los jóvenes merecedores la oportunidad de poseer una licencia de conducir. Esta acción permitirá que los soñadores se integren enteramente y contribuyan a nuestra economía local. Asimismo, es una medida que permitirá que Arizona progrese a un mejor futuro”, destacó.