Los padres nunca deben dejar a sus hijos sin supervisión cerca de una piscina, advirtieron los bomberos. Foto: Cortesía Phoenix Fire Department

Con la llegada del calor, las piscinas se convierten en una de las opciones preferidas de los niños para resfrescarse de las altas temperaturas.

Ante este escenario, el Departamento de Bomberos de Phoenix inició ayer, primero de abril, una campaña educativa dirigida a los padres sobre los peligros y las precauciones que deben tomar con sus hijos cuando están en las albercas.

Bomberos de la Estación 17 llegaron hasta la piscina del Pointe Hilton Squaw Peak Resort, en el norte de Phoenix, donde –como parte de la iniciativa- simularon una escena de ahogamiento infantil y posterior rescate.

La demonstración, llevada a cabo en lo que denominaron “April Pools Day”, buscó generar conciencia sobre los incidentes de riesgo que pueden darse en las albercas.

Algunos de ellos pueden terminar en daños neuronales e, incluso, la muerte.

El mensaje de la campaña es uno de prevención.  Los bomberos hicieron un llamado a los padres a que creen consciencia en velar a los pequeños en todo momento.

Bomberos de Phoenix simularon una escena de ahogamiento infantil y posterior rescate. Cortesía Phoenix Fire Department

La iniciativa de seguridad infantil en las piscinas cuenta, además, con el auspicio de SRP, Banner Health y City of Phoenix Aquatics.

Tips útiles

Sigue estas medidas preventivas de la Facultad de Medicina de The University of Chicago para proteger a tus hijos contra el ahogamiento:

• Nunca dejes a tu hijo sin supervisión cerca del agua fuera o dentro de la casa, incluyendo una piscina.
• Aprende a hacer resucitación cardiopulmonar ( CPR) y primeros auxilios para niños y bebés.
• No confíes en los dispositivos personales de flotación ni en las lecciones de natación para proteger a tu hijo.
• Instala una valla a prueba de niños alrededor de las piscinas.
• Asegúrate de tener equipo de salvamento, un teléfono y los números de teléfono de emergencia cerca de la piscina.
• Procura que tu hijo use un dispositivo personal de flotación aprobado por el Servicio de Guardacostas de Estados Unidos.
• No dejes que los niños salten al agua de cabeza en profundidades inferiores a 9 pies (2.74 m).